Escuchar a tu pequeño roncar puede parecer adorable al principio. Quizás hasta has grabado un video para compartirlo con la familia. Pero, ¿y si ese ronquido no es solo un sonido gracioso? Como pediatra, te invito a descubrir por qué los ronquidos frecuentes en los niños podrían ser una señal de algo más serio que merece tu atención.
Imagina esto: son las 3 de la mañana, la casa está en silencio, y de pronto escuchas a tu hijo roncar como si fuera un adulto agotado. Puede sacarte una sonrisa, pero detrás de ese ruido podría esconderse un problema que afecta su salud y bienestar. Aquí te explico todo lo que necesitas saber.

¿Por qué roncan los niños?
Los ronquidos ocurren cuando el aire encuentra un obstáculo en las vías respiratorias durante el sueño, haciendo vibrar los tejidos blanditos de la garganta. Aunque es común que los niños ronquen de vez en cuando, hacerlo habitualmente puede ser una bandera roja. Las causas más frecuentes incluyen:
- Amígdalas o adenoides grandes: Estas glándulas en la garganta pueden bloquear el paso del aire. Seguro que haz oído que a alguien se las quitaron.
- Alergias respiratorias: La congestión nasal dificulta la respiración y mucho moco.
- Obesidad infantil: El exceso de peso puede estrechar las vías respiratorias.
- Problemas estructurales: Una nariz o mandíbula pequeñas puede ser un factor de riesgo.
- Condiciones neuromusculares: Alteraciones como el Síndrome de Down afectan los músculos de la garganta.
Según la American Academy of Pediatrics, cerca del 10% de los niños roncan regularmente, y entre el 1% y el 5% podrían tener apnea obstructiva del sueño (SAOS), una afección en la que la respiración se interrumpe brevemente mientras duermen.
Señales que no debes ignorar
No todos los ronquidos son inofensivos. Si tu hijo ronca más de tres noches por semana, hace ruidos fuertes o tiene pausas en la respiración, es momento de prestar atención. Otros signos de alerta incluyen:
- Dormir con la boca abierta constantemente.
- Respiración agitada o movimientos extraños al dormir.
- Cambios en el comportamiento: hiperactividad, irritabilidad o falta de concentración.
- Mojar la cama con frecuencia (enuresis nocturna).
Estos síntomas podrían apuntar a apnea del sueño, que ya es un problema mayor y una consulta médica es el mejor paso para descartarla o tratarla.
¿Qué pasa si no se trata?
Dejar pasar los ronquidos frecuentes o la apnea del sueño puede tener consecuencias serias. Estudios de la Sleep Foundation muestran que los niños con SAOS tienen mayor riesgo de:
- Dificultades escolares por falta de concentración, bajo desempeño escolar y deportivo.
- Problemas de comportamiento similares al TDAH, aún cuando realmente no tengan ese diagnostico
- Hipertensión arterial a largo plazo, asi como problemas cardiacos, metabólicos y sobrepeso.
Actuar a tiempo puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida de tu hijo.
Los Consejos del Doc
Si notas que tu hijo ronca regularmente, aquí tienes algunos tips muy prácticos:
- Observa con atención: Si el ronquido es constante, fuerte o viene con pausas respiratorias, es momento de vernos en consulta cuanto antes.
- Cuida su calidad de vida: Un peso saludable reduce el riesgo de ronquidos relacionados con obesidad y mejorar la actividad física también son de gran ayuda. El enfoque no es el peso si no los hábitos saludables.
- Evita irritantes: Mantén su cuarto libre de polvo, humo o alérgenos como el polen, peluches en exceso, alfombras y tapetes son muy bonitos pero acumulan aeroalérgenos que no queremos
- Mejora sus hábitos de sueño: Dormir temprano, disminuir los tiempos de pantalla al mínimo, oscurecer su cuarto y descansar comodamente sin duda ayudan a lograr un sueño mucho más reparador.
- Busca un diagnóstico preciso: En ocasiones es necesario acudir a valoración con otros especialistas como el otorrino, un nutriólogo y una buena valoración pediátrica con sus estudios correspondientes son herramientas ideales para evaluar la severidad del problema. Si bien el gold standard de diagnóstico es la polisomnografía en México todavía estamos en pañales para el adecuado y preciso diagnóstico de este problema creciente de salud, estoy seguro que en poco tiempo se volverá parte de nuestras pruebas de rutina.
En mi experiencia en Clínica del Niño, he visto cómo una intervención temprana transforma la vida de los pequeños y sus familias.
¿Cómo se trata el ronquido o la apnea del sueño?
El tratamiento depende de la causa y puede incluir:
- Tratamiento médico: Para alergias o inflamación nasal, usamos normalmente la base de la limpieza, descongestión y desinflamación que ya te he platicado en otros enlaces.
- Ortodoncia: Una valoración por un odontólogo infantil es de gran valor en algunos caso se requieren dispositivos que mejoran la forma y función de la boquita de nuestros niños y a su vez las vías respiratorias.
- Cirugía (adenoamigdalectomía): Quitar amígdalas o adenoides agrandadas en casos SÚPER seleccionados por el especialista puede mejorar radicalmente.
- El CPAP: Una máquina que ayuda a mantener la respiración durante el sueño (muy poco usado actualmente)
Según KidsHealth, hasta el 37% de los niños que roncan habitualmente podrían desarrollar apnea del sueño si no se actúa a tiempo. ¡No subestimes este dato!
Actúa hoy por su bienestar
Si tu hijo ronca con frecuencia, no lo dejes pasar como algo “normal”. Platicar estos temas durante la consulta puede prevenir complicaciones y asegurar que tu pequeño duerma tranquilo y crezca sano. Visítanos en Clínica del Niño y toma el control de su salud del sueño.
Referencias
- American Academy of Pediatrics. Pediatric Sleep.
- Sleep Foundation. Children and Sleep Apnea.
- Sociedad Española del Sueño. Apnea del sueño infantil. ses.org.es/apnea-del-sueno-infantil/
- American Thoracic Society. Pediatric Sleep Disordered Breathing. [www.thoracic.org/patients/patient-resources](https://www.thoracic.org/patients/patient-resources/resources/pediatric med-sleep-disordered-breathing.pdf)
- KidsHealth. Sleep Apnea in Children.